Hay una cita que
dice: “A veces te encuentras en medio de la nada, y a veces, en medio de la
nada te encuentras a ti mismo”.
Mi en medio de
la nada, donde yo aprendí más a cerca de mí misma, fue un pueblo llamado Olmos.
Este pequeño en medio de la nada está ubicado
en Argentina, que es donde yo empecé a sentir amor por la gente Latina y su
cultura. A veces siento que dejé mi
corazón allá, un lugar al que amo y que también me ama. La gente de allá
realmente influenció, y me hizo ser más humanitaria en mi vida diaria, tengo el
deseo de prestar servicio en su favor. Es asombroso encontrar personas y sentir
que las conoces desde siempre, ellos me ayudaron a encontrar el balance que
necesitaba en mi vida. No se trata de lo que tienes, sino de lo que puedes
compartir con ellos, es una actividad que ya no hago, pero me gustaría seguir
intentándolo. Has estado en una habitación y has podido sentir cuánto te aman
y qué emocionados se sienten de verte? Hace
mucho que no me he sentido así. Adoro regresar a Perú, porque al saludarlos me
abrazan, me besan, y festejamos. Cuando
pienso en regresar a Olmos, puedo imaginar a la gente corriendo en la calle y
gritando Herman Bach! Hermana Bach,
regresó, No puedo esperar! Quiero
dedicarles mi mensaje y compartir las razones por las que me inspira a vivir y
servir en la cultura Latina.
·
LA
FAMILIA ES TODO
Usualmente
pienso que familia es solo mi familia personal, nunca antes había experimentado
otra clase de acercamiento con alguien más. La gente de Olmos me enseñó a
aceptar a otras personas en mi vida, como familia. Ellos me cuidaron, y me dejaron ser yo misma.
El primer Domingo que llegué a Argentina, conocí a la Hermana María, Ella me
cuidó, me escribió, quería enviarme regalos, incluso me visitaba si yo necesitaba
ayuda. Ahora cuando hablamos es como si
el tiempo no hubiera pasado, y puedo escuchar en su tuno de voz, el amor que me
tiene, eso me inspira. En Español lo llamamos “Cariño”. Espero un día tener la
misma fe y amor que ella tiene. Te amo
María!
·
SEGUNDO,
LA VIDA ES UNA FIESTA, DONDE SIEMPRE DEBE HABER COMIDA
Nunca me he
reunido con alguien o estado en alguna casa, que no incluyan comida y música,
adoro esa tradición. Ellos te alimentan
incluso cuando ellos no tienen nada, te invitan aunque no haya suficiente, eso
me enseñó que no hay que vivir en escasez sino en abundancia. Otra tradición
que me ha inspirado, es que ellos nunca dejan a nadie afuera, cuando alguien
llega a casa a la hora de la comida, siempre lo van a invitar, si están
jugando, lo invitan a jugar con ellos, o si están bailando también lo hacen
bailar. Maravilloso!
·
LA
ULTIMA TRADICION QUE ME HA INSPERADO ES LA FORMA DE DAR LA BIENVENIDA
Cuando entras a
alguna habitación, cada persona que está ahí, saluda con un abrazo y un beso,
reconocen tu presencia, y al despedirse ellos lo hacen con cada uno también,
construyendo confianza y cercanía, cosa que yo realmente disfruté.
No mucho de mi
esposo y yo esta semana, pero quise compartir las experiencias que me ayudaron
a encontrarme a mí misma. Vivo para amar, para inspirar, para tener esperanza, y
servir a otros, todo por ti Olmos. Mi en medio de la nada, mi refugio. Besos.
Hasta pronto.
chao chao
Ashley.